03 diciembre 2010

Jhony 20


Mi nombre es 20, Jhony 20, y no recuerdo dónde nací. Lo que sí sé es que no me queda mucho tiempo.

He viajado largo rato por el mundo; cruzado fronteras en varias ocasiones sin mostrar nunca mi identidad, nunca fue necesario; he paseado al lado de chicas maravillosas y he compartido sábanas con ancianas solitarias.

Me vi involucrado en un asunto turbio relacionado con drogas. No era la primera vez. Recuerdo una tremenda reyerta por unos gramos de coca... En ese escenario estaba yo, impasible, como un tipo duro y frío, casi diría, valiente y altivo ante la situación. Ese día había salido "a pillar algo" con Alex, un gran "cabeza loca",  empeñado desde chico en complicarse la existencia. ¡Con la buena vida que habría podido llevar!...

Tras la tremenda trifulca, me separé de él. No tengo grandes recuerdos de lo que ocurrió después porque, creo, que iba un poco "puesto".
Después de muchas vueltas, recorriendo bares de copas, conocí a Graciela; hermosa mujer. Trabajaba en la calle y alquilaba su cuerpo al mejor postor.

Esa noche decidió acabar temprano y nos retiramos a su casa. Y digo "nos" porque me fui con ella. Entró en su casa descalza, con sus zapatos en las manos y sin hacer ruido. Se dirigió al lavabo. Le observé mientras se desmaquillaba los ojos con un aceite de baño barato, de esos que se utilizan para los niños. Se quitó la ropa de trabajo y se dirigió hacia una pequeña habitación donde un pequeñito soñaba en su cuna. Se acercó a su carita y le besó con ternura. Comprobó con los labios la temperatura de su frente y respiró profundo. Creí ver lágrimas en sus ojos, aunque pudiera ser el aceite que se acababa de aplicar. Al lado, una mujer  dormitaba su cansado cuerpo en una silla.

    -Buenas noches, Laura. ¡Venga, despierte y vaya a su casa que es tarde!  Aquí tiene su dinero...
    -Gracias señorita Graciela.

Acompañé a Laura. Era tarde y no le iba a dejar sola. Su casa era apenas una habitación en un "chamizo" que compartía con tres niños. La estancia se componía de dos colchones, una mesa con cuatro sillas y dos maletas (curioso mobiliario). Cuando llegamos una niñita de siete u ocho años se levantó descalza y se abalanzó al cuello de la madre, besándole con amor.

     -¡Qué bien que has venido, mamá!.
     -Venga, bonita ¡a dormir!. Tienes que descansar ángel... Solo díme ¿cómo se portaron los niños?
     -Muy bien, mamá. No te preocupes...

Laura se quedó dormida abrazando a su ángel, porque así era como llamaba a la niña. Observar esta escena me enterneció, lo confieso.

En pocas horas amaneció. Laura se levantó con un "sigilo sacramental" para no despertar a sus hijos. Quería que ese día fuera especial porque su pequeño Manuel, cumplía tres años. Iba a comprarle una tarta y un regalito y lo celebrarían todos juntos, en familia. Desde hacía algún tiempo no podía dar mucho a sus hijos; ni siquiera tiempo. Las cosas le fueron mal y hubo de dejar su modesta casa y huir con sus tres hijos, de su marido... Vivían, practicamente, escondidos en esa habitación, de la que solo salía para "echar una horillas" limpiando casas o cuidando niños y ancianos. Pero se había jurado que las cosas iban a cambiar..

La tarta para sus hijos ¡no iba a faltar ese día!.

Perdí la pista de Laura en la caja del Super, pensé que me había dado esquinazo. Allí una cajera se fijó en mí. Me sentí casi halagado que, entre tantos, se fijara precisamente en mí...
      -Míra, Clara ¡qué viejo!... Hmm, habrá que dárselo al encargado... está tan deteriorado.
      -Sí, pero míra, observa, alguien escribió su nombre en este billete de 20€... "Jhony ... 20".




Porque sí, eso es lo que soy, solo un billete de 20€ ... Pero,  ¡con mucha imaginación!.

Ya dije, al principìo, que sabía que no me quedaba mucho tiempo porque uno, se da cuenta de estas cosas, máxime cuando se emiten campañas de recogida de billetes muy usados para restituirlos por otros más nuevos. Son cuestiones de sanidad... Lo entiendo.

He viajado, he vivido y he pasado por tantas manos y tantas carteras, que podría escribir un libro. Ésto de ser un cuenta-cuentos, quizá, lo pensé demasiado tarde. Ahora sólo os dejo la historia de mi último día y, como epitafio, el nombre que alguien escribió, una vez, en rojo, para mi:

Jhony 20


33 comentarios :

  1. Tengo que aplaudir!!! fabulosa historia. Que personajes fuertes y que cosas conmovedoras. Me encantó, de principio a fin, magistralmente escrita.
    Te felicito Towanda, este tipo de historias hacen mi deleite.

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  2. Gracias Guille. No sabes cuánto me alegro que te gustara el peregrinar de un pobre billete de curso legal por el mundo. ¡Cuántas cosas contarían si pudieran hacerlo! ¿verdad?.

    Tenía ganas de contar algo así, desde hace mucho tiempo pero no encontraba el modo de hacerlo.

    Agradezco muchísimo tu comentario porque no estaba muy segura.
    Un besazo desde el frío Madrid.

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  3. WuuuuUuAaaUuUU la verdad pensé que era una persona, un hombre jaja, que ingenua soy, esta muy hermosa la historia, hay si las paredes pudieran hablar como dice mi madre, si tantas historias, y no nos dejaran en paz, es hermoso, ya había leído algo parecido, pero era de un perro, no de un billete, genial.

    Pasas por mi blog

    Con amor evy

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  4. Gracias Evy, cuánta razón tiene tu mamá... Un billete ¡madre mia!, del bolsillo de una persona (y en pocas horas) al de cualquier otra, completamente diferente.
    Me alegro que te gustara el cuentecillo.
    Un beso.

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  5. Aclaro que también pensé que era un muchacho hasta el final y eso fue lo que sorprendió y gustó. Nuevamente felicitaciones.

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  6. No me imaginaba para nada ese final. Muy creativo! Me gusta mucho como escribis.

    Nos leemos!
    Un saludo desde Argentina!

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  7. Guille, nuevamente te agradezco tus palabras y aprovecho el espacio para saludarte, al tiempo que espero tu nueva historia...

    Mai, un saludo desde el frío Madrid, gracias por venir y por comentar.
    Un abrazo y ¡nos leemos!

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  8. Buen relato towanda. Qué imaginación tienes me ha gustado mucho tu blog. Un saludo.
    Bel

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  9. Bel, gracias por venir y comentar.

    Evy, te he dejado varios comentarios en tu blog pero no aparecen... ¡Algo pasa en tu espacio!. No sé qué será. Un besazo.

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  10. Creo que es de lo mejor que he leído en mi intensa (corta, pero intensa) vida en el mundo de los blogs...
    Cuando era niño leí un micro-relato que era la historia de una moneda, incluso mucho peor narrado que tu historía y recuerdo que ese relato ganó un premio a nivel nacional (cosa que tu mereces ahora...). Genial.

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  11. La historia es una mezcla de cuentos de Navidad y la cerillera, aunque son obras de ficción el contenido es como la vida misma, se pueda dar en Madrid y en Tombuctú, el dinero es efímero como las cerillas que se apagan en un santiamén pero producen ilusión momentánea sea de celebrar un cumpleaños o de tener un momento de luz y calor.

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  12. Rombo ¡vaya comentario!.
    Graaaaaacias. No sé qué más puedo decir. Me alegro que lo encuentres bien narrado...
    ¡Qué contenta estoy!.
    Muchas gracias por pasarte y por levantarme el ánimo ¡taaanto!.
    Un abrazo.

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  13. Resurgimiento, efectivamente, el dinero es efímero como las cerillas, pero también como las palabras... Te agradezco mucho tu aportación.
    Gracias por pasear por mi "rincón".

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  14. Greetings from Brazil.
    Loved the way you keeped it going. Well done.
    Looking forward to see more.
    Besitos :D

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  15. Lee, Thank you very much for your comment.
    I really enjoyed your visit.
    Kisses from Madrid.

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  16. Guau vaya história.Está genial, y eh de confesar que yo tb eh picado en el personaje. Muy bueno y sorprendente.Hasta sentí lástima por el pobre billete.Enhorabuena por tu blog.
    Por otro lado también felicitarte por el nombre,Towandaaaaaa!!! Yo tambien soy de las que me identifico mucho con esa frase y en mas de una vez me la repito a lo largo de mi vida. Tomates verdes fritos una película que te hace ver los problemas desde otra perpectiva.

    Saludos*

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  17. Bruni, muchas gracias por aportar tu comentario. Me alegro que te gustara la historia del pobre billete... ¡Vaya vida que llevó!.

    En cuanto a Towanda, me encantó la película, de hecho es una de mis favoritas. ¿Sabes cuando empleo la palabra "towanda"?... Sobre todo cuando tengo que pasar con el coche por un sitio muy estrecho, entonces me digo: "Towaaaanda" y parece que el espacio se hace más grande y puedo pasar fácilmente... jajajaja. Entonces recuerdo a Kathy Bates en el aparcamiento con las dos rubias y ¡paso por donde sea!

    Mil gracias por venir por aquí y por compartir el término "Towanda" como nuestro grito de guerra.

    Un besazo.

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  18. jajajajaja Vaya esa escena seguido de cuando llega el marido a casa y se encuentra con todos los cambios es una de mis preferidas.En el aparcamiento la cara que se le queda a ella,despues de aver-lo echo,es de una satisfación total.Y las de las rubias ni te cuento jajaja Buenísimaaa!!

    Y bueno me pasaré por aqui mas a menudo.Ya que soy una novata en esto,apenas llevo un par de dias y todavía nose muy bien como funciona.
    Pero me parece muy interesante tus blogs. Sobretodo lo de que esta pasando en el sahára y la história de Antonio.Seguí su historia por tv y la verdad que es tan dificil de creer,que injusticia y impotencia mas grande.
    Olé por su familia y sobretodo la madre.Una mujer de sacar el sombrero y digna de ejemplo.No perdió la compostura en ningún momento y a estado al pie de cañón siempre.Enfim enhorabuena una vez mas.

    Hasta pronto!

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  19. Posees el don de dar ese sentido de vida a lo inanimado. Desde las arenas del desierto al papel del dinero, ambas materias inerte que se mueven unas por el viento y la otra por nuestro sistema pero consigues sacarlas del anonimato y darles no funcionalidad sino sencillamente vida.
    Leo tu relato y pienso en cada ocasión en que pasan por nuestras manos y en ese automatismo con el que pasa el dinero como meras operaciones numéricas, que ya por ello deberíamos sentirnos afortunados pero a través de Laura consigues que aprecie mucho mas a 20, incluso a 10 o a su hermano 5 cuando haya de usarlo.
    Por cierto, pondré Jhony a primero que me llegue con boli rojo :)

    Un abrazo enorme y feliz lunes!

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  20. Carlos, ¡cómo te había echado de menos! (también a Sandra) porque me importa mucho vuestra opinión. ¡Ojalá! tuviera ese don que dices, o cualquier otro, porque lo explotaría al máximo. Si pudiera ¡ahora mismo!.. se me ocurre... por ejemplo cambiar la mitad de la arena del desierto por agua.

    Ah! lo de ponerle Jhony a tu próximo billete es una buena idea porque, quizá, podría llegar en días o semanas a mis manos y luego a las de cualquier otro y "volar" como una paloma mensajera... ¡Qué bonito!

    En fin, Carlos, gracias como siempre por tu comentario.
    Un fortísimo abrazo y buena semana para ti también.

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  21. Buenisimo!!! no me esperaba que fuera un billete. Me encantó, derrochas imaginación. Siento no haberme pasado antes, la verdad es que me despisto bastante y creo que ya he pasado por los blogs y después me doy cuenta de que no es así.

    Me ha hecho pensar, cuantas personas y tan variadas habran tenido un mismo billete. ¿Sabes? Creo que deberíamos poner frases bonitas sobre ellos, seguro que roban más de una sonrisa. Tengo uno de cinco en la cartera, pienso hacerlo .

    (sí, soy pobre, sólo doy para uno de cinco :P )

    Un beso colorido como tus mariposas.

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  22. Ana, gracias por venir. Me alegro que te gustara.

    En cuanto a la iniciativa de poner frases bonitas en ellos... Me apunto y, creo que Carlos iba a hacer algo también.

    Bueno, lo dicho, gracias y otro beso si me lo permiten las mariposillas que se posan en el puntero...

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  23. Qué buen cuento ¡escribes de una manera increíble! realmente me impresionó, estuve pegada de principio a fin y qué decir.. claro que no me lo esperaba, pero me gustó la sorpresa :D ! Saludos y un abrazo!

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  24. Caraba, muchas gracias por tus palabras...

    La sorpresa, éso era precisamente lo que quería conseguir en el lector y me doy por bien satisfecha si, al menos, en algunos lo conseguí.

    Un fortísimo abrazo tambien para ti.

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  25. Ese giro que da la historia para revelarnos la identidad del narrador es verdaderamente sorprendente, me ha encantado porque a pesar de haber hecho yo algo similar en el pasado (aunque en lenguaje audivisual) lo cierto es que no lo esperaba para nada, lo has logrado muy delicadamente.

    Pero permíteme decirte que cada una de las palabras elegidas, cada una de las constucciones que haces están realmente logradas y, entre tu y yo, también me enternecí cuando leí lo del beso.

    ¡Ah! Y puedes seguir "entrometiéndote" cuanto quieras en mi blog. Muchas gracias.

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  26. Gracias P. Kwicks. Creo que conseguí lo que quería y, aunque no me he ido de puente, estoy contenta con este relato.

    Si te enterneciste con el beso ¿no opinas, conmigo, que hay esperanza?... No sé para qué, concretamente, pero la hay. Creo que sabrás a qué me refiero.

    Ya te digo en tu blog que te seguiré de cerca y ¡muchas gracias! por haber venido tú también.

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  27. Si no pensase que hay esperanza al final del camino, habría dejado de recorrerlo hace mucho. Solo que me desespera no encontrarla.

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  28. Odio llegar tarde para comentar, ya no queda nada que decir!!

    Un billete, da igual cuál sea, unas veces dice tanto y otras tan poco... Fíjate lo que puede hacer para Laura y, seguramente para Menganito, no tenga ningún valor. Unas veces es despreciado, otras adorado. Pueden llevar mensajes para otras personas. Más de una vez me he topado con algún número de teléfono (algo que nunca haría yo), otras una simple suma o un corazón dibujado... Incluso, sirven para jugar pues, escuché en la radio una vez que habían repartido por toda España algunos billetes de 5 €, con un pie dorado dibujado. El que encontrara los billetes debía llamar al programa y llevarse un premio.

    Sublime, Towanda, cada día te superas. Un besote enormísimo.

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  29. Sandra, te eché de menos (fuiste mi primer contacto en serio con bloggilandia y "mi madrina") pero aquí estás como siempre dándome ánimo y felicitaciones.

    ¡Cuántas historias podrían contar las monedas de curso legal...! Y cómo, aún siendo siempre el mismo valor facial, varia tanto el valor para cada quien o cada cual que lo tenga en sus manos.

    Gracias por todo y un beso el doble de enormísimo para ti.

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  30. Original. Hasta el final no me he dado cuenta de que se trataba de un billete. ¡Cuántas historias podría contar un billete de 20 euros! A propósito de este cuento te recomiendo "El diálogo de los perros" de Cervantes. Solo que ahí en vez de un billete se trata de dos perros, que hablan de sus andanzas. O más bien de uno solo, porque el otro me parece que quedó por contar sus historias. A ver si te animas y nos completas la novela. ;) Saludos.

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  31. Mirlo, otra vez, gracias. Conozco el diálogo y ¡me has dado una idea!, voy a terminarlo jajaja.

    ¡Cuántas historias podría contar un billete de euros!... Muchísimas, por supuesto, aquí dejé solo tres pero seguro que a ti se te ocurrirán muchas más.

    Un abrazo y ¡gracias por tirar de archivo y resucitar a Jhony 20!.

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  32. No suelo hacerlo mucho Towi ( ¿te puedo llamar Towi?) pero cuando he visto la magnífica historia de jonhy me has recordado a esta : … si te apetece.

    clicka aquí

    …y hay alguna historia más que me ha hecho sonreir. Muchas gracias Towi …hacía tiempo que no sonreía… :)

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    Respuestas
    1. Hola Tomae... Ya te he dicho en tu casa que me he quedado a cuadros.

      Para que veas que hay muchas almas gemelas en la bloggosfera, jajajaja.

      Claro que me puedes llamar Towi o como te apetezca. Muchas gracias por llevarme a tu casa a conocer la historia interminable de un billete de 20€. Lo que es la vida.

      Un besazo y no dejes de sonreir nunca; yo lo hago aunque hoy me dolía mucho la cabeza. Es bueno para el espíritu.

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